El partido del pasado sábado estaba condicionado por varios factores. El primero de ellos y puramente deportivo era que se enfrentaban los dos equipos que encabezaban la clasificación; el segundo era que dos integrantes del CD CASTELLON se iban a "jugar los cuartos " con sus compañeros de batallas del patio del colegio y la última, y más emotiva, era que los hermanos Barberán se iban a enfrentar en un terreno de juego; finalmente la victoria se la llevó el hermano mayor, aunque solo por un minuto.
Dado de lo especial del enfrentamiento ambos técnicos eligieron a los gemelos para capitanear el encuentro y de esa manera, con un apretón de manos, comenzó un encuentro muy igualado en los primeros compases, aunque esto pudo no ser así, si cuando tan solo se habían disputado un par de minutos de juego, y fruto de una falta al borde del área albinegra, Diego hubiera dirigido el balón 20 centímetros más abajo ya que el esférico se fue a estrellar al larguero con el consiguiente susto para la parroquia orelluda.
Los informes transmitidos por ambos espías de los equipos se vieron plasmados en el terreno de juego, ya que el conocimiento del contrario era total, cada rival conocía las virtudes del equipo contrario e intentaban evitar que estas salieran a flote; si bien el control del balón era local, este no se traducía en ocasiones claras para ninguno de los dos contendientes, y como suele ocurrir en estas situaciones el marcador se altera con una jugada a balón parado y con unas gotitas de suerte, ya que fruto de un saque de esquina, el guardameta del TORRESPORT no acierta a despejar el esférico, y en el intento de un defensor de alejar el balón de su portería tuvo la mala fortuna de golpear en un compañero, introduciéndose en su propio marco, corría el minuto 18 de la primera mitad y el CD CASTELLON presentaba sus credenciales a la victoria.
El gol no hizo que el conjunto local bajara la intensidad, y la presión a la salida de balón escolapia era asfixiante, logrando desbaratar los inicios de jugada y provocando con ello alguna que otra ocasión de alterar el resultado, por contra casi todos los intentos visitantes de acercarse al marco de Andrés se veían desbaratados por una perfecta defensa liderada por un Iñaki inconmensurable.
Con el 1-0 finalizó la primera mitad, con el convencimiento generalizado de que en la reanudación se vivirían momentos intensos similares a los de la primera mitad, pero nada más lejos de la realidad, ya que nada más iniciarse el segundo tiempo el CD CASTELLON puso tierra de por medio logrando tres tantos en tan solo 2 minutos. El primero de ellos de Iñaki, que redondeó su gran actuación, logrando su primer gol de jugada de la temporada, gracias a un tiro bombeado lo que dificultó la tarea de Alejandro que no pudo despejar, a continuación Juan perforaba por tercera vez la portería contraria al recoger un rechace del propio cancerbero en boca de gol y sin tiempo para reaccionar, de nuevo Juan, no tuvo compasión de sus compañeros, y el solito robó el balón tras el saque de centro y tras deshacerse de su hermana batió al portero en su salida.
El 4-0 hundió anímicamente al conjunto del TORRESPORT, ya que en dos minutos se había ido al traste todo el buen trabajo realizado en el primer mitad, y esta circunstancia la acusaría lo que restaba de partido, estando a merced de un CD CASTELLON muy crecido y que con el marcador a favor juega muy cómodo.
Con el resultado tan a favor el CASTELLON levantó un poco el pie del acelerador, aunque eso no supuso una disminución de las ocasiones de gol, ni menor control del esférico, ya que se paso a desarrollar un juego más elaborado ya sin las prisas del resultado claramente decantado del lado albinegro, y fruto de una gran jugada de Carlos Jaime llegó el 5-0 finalizando con fuerza un slalom por banda derecha.
Esta segunda mitad se le estaba haciendo eterna al TORRESPORT, ya que quedaban por delante todavía 15 largos minutos, en los que el conjunto local, notando la debilidad tanto física pero sobre todo anímica del contrario, quería aprovechar para poner de manifiesto su supremacía en este encuentro, y el sexto no tardó en llegar de los pies de Natxo que, en una jugada calcada al tercer tanto de Juan, empujó un rechace del portero al fondo de las mallas, tras un potente disparo de Carlos Esbrí.
La cuenta goleadora la cerró Marc que tras recibir una buena apertura de Juan fusiló al portero contrario, que nada pudo hacer para evitar el 7-0 definitivo. De aquí al final, el partido transcurrió por la misma tónica que los minutos precedentes, el balón discurría por el campo visitante y Juan, so pena de expulsión del colegio, intentaba una y otra vez lograr el tercer tanto que finalmente no llego, lo que si llegó fue la primera y única ocasión del TORRESPORT de esta segunda mitad y un gol fantasma del mayor de los Barberán que el arbitro no concedió.
En resumidas cuentas buen partido, muy serio por parte del CD CASTELLON que supo imponer su juego al de un TORRESPORT que, más por mérito ajeno, no pudo desarrollar su juego al no lograr tener la posesión del balón tan necesaria para un equipo con la calidad del conjunto escolapio.
La mañana finalizó con una foto común, que será difícil de olvidar para algunos de los integrantes de ambos conjuntos, poniendo el colofón a una bonita matinal de fútbol y confraternización.
PAM PAM ORELLUT
