En un mañana muy fría, nuestros chicos empezaron enchufados desde el primer compás del encuentro, y antes de que se cumpliera el tercer minuto de partido, el actual líder, ya se ponía por delante gracias a un gol de César.
El enfrentamiento se presentaba cómodo, sobre todo por el juego desplegado por el conjunto albinegro en uno de los mejores partidos disputados siendo un claro ejemplo de nuestra forma de entender el fútbol como lo que es: un deporte de equipo.
Tras unos acercamientos sin demasiado peligro del equipo albirojo, motivados en gran parte como respuesta a nuestro tempranero gol, el partido retornó a sus cauces iniciales, y el equipo local volvió a hacerse con el control total del encuentro. Fruto de ese dominio llegó el segundo tanto gracias a una falta al borde del área ejecutada por Jairo, lo que me reafirma en que somos un equipo y que si no está en el terreno de juego el habitual lanzador existen otros jugadores con similar clase capaces de hacerlo con la misma efectividad. Gran gol el del central que le dobló las manos del buen arquero contrario. Con este resultado de 2-0 se llegó al descanso.
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