Feo y aburrido partido el vivido en la matinal del sábado en el campo Municipal de Alqueries, sin duda lo mejor los tres puntos que se han venido a la capital.
Como dice la canción de Mecano "...entre el cielo y el suelo hay algo..", pues en nuestro caso solo ha pasado una semana desde que nuestro prebenjamin ganara con solvencia a un correoso Club La Vall realizando uno de los mejores partidos de la temporada, mientras que hoy ha costado Dios y ayuda doblegar al voluntarioso Alqueries con un juego muy poco vistoso, en parte provocado por el orden defensivo del equipo arlequinado.
Como alguien ha dicho al finalizar el encuentro, el partido se ha ido enfriando como el día, soleado al principio y nublado e intempestivo al final; eso si, el control ha sido total de de cabo a rabo por parte de la escuadra albinegra, que lo intentaba pero el cerrojo echado por el Alquerias se tornaba infranqueable para los nuestros, a pesar de ello, y sin ese juego brillante que nos caracteriza, hemos dispuesto de varias ocasiones para conseguir el primero estrellando sendos balones en el poste y otro en el travesaño. Solo una falta ejecutada por bajo ha conseguido sorprender a un atento arquero local.
Tranquilizador gol, pues este partido recordaba al disputado en Betxi a principio de temporada, en el que nos tocó sufrir más de la cuenta aunque con mucho más sufrimiento debido a la incertidumbre del resultado.
El encuentro no cambio a raíz del gol, el propietario del terreno de juego resguardado en su campo aguantando las tímidas arremetidas de un CD CASTELLON contagiado del poco ritmo del partido.
La tónica en la reanudación no cambió, un quiero y no puedo de nuestros chicos, y un ni quiero ni puedo del equipo rival, ahora bien, en el ambiente se respiraba cierta preocupación por lo ajustado del resultado y que alguna jugada aislada pudiera tirar al traste todo el trabajo del año, no obstante tanto la defensa, que ha rallado a gran altura, como un desfaenado Nacho Mingol han resuelto con mucha solvencia las aproximaciones alquerienses, y como fruta madura, en las postrimerías del encuentro ha llegado la tranquilidad en forma de dos goles, uno de ellos tras una espectacular bolea de César desde la frontal del área que se ha colado sin que el portero rival pudiera hacer nada para impedirlo.
Tres puntos más que nos acercan a la meta, y la semana que viene MAGDALENA FESTA PLENA.
PAM PAM ORELLUT
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