lunes, 14 de junio de 2010

MI VECINO

Desde que nací, allá por el año 1923 siempre he vivido en la misma comunidad de propietarios. Esta comunidad estaba y está formada por un grupo de familias de distintas clases sociales, con capacidades económicas distintas y con aspiración diferentes. Una cosa había sido norma es nuestras vidas, si algún vecino estaba en mejor situación que los demás, siempre intentaría ayudar al resto.


Hasta hace unos años, yo era el vecino mejor posicionado, había vivido mayoritariamente en el 2º A, un pisito modesto pero bien amueblado, que de vez en cuando, gracias a la sus preciosas vistas te hacia soñar con que vivía en un ático…

La verdad que durante 11 años, mi familia soñó con la posibilidad de poder instalarnos definitivamente en el ático… pero ese sueño, a pesar de que estuvo cerca nunca llego. Tuvimos años buenos… muy buenos, en los que casi logramos tocar el cielo, ese cielo estaba en Madrid, al lado de rio Manzanares, pero vinieron los del barrio de Bilbao y nos dieron con el sueño en las narices.

Después de este mal trago, o bueno, depende de cómo se mire, asumimos de manera definitiva que vivir en el ático era tarea difícil y que nos teníamos que conformar con asomarnos algún que otro año a la terraza …

Durante estos tiempos, ayudamos muchos a algunos de nuestros queridos vecinos. A algunos de ellos les dejábamos nuestros muebles, todavía en buen uso, para que pudieran vivir en sus modestos pisos de manera de confortable, incluso en algún momento les dejamos el coche para ir a trabajar porque no se podían permitir pagar la gasolina del suyo. Estos vecinos eran gente cordial, agradecida, algunos de ellos, venían a nuestra terraza, a la terraza del 2º A a pasar a algún que otro domingo … incluso compartían nuestras ilusiones cuando se asomaban y veían lo que desde su casa no podían ver.

De repente, sin saber muy bien por qué, tuvimos que mudarnos, teníamos que dejar nuestro modesto pero confortable piso, para irnos al vivir al 2º B, un piso que apetentemente era parecido, pero que en realidad no tenía nada que ver con el anterior. No tenía vistas, solo se veía un patio interior, incluso se podía divisar un pozo, pozo en el que, aunque casi no lo recordamos, andamos cerca de caer en algún momento.

Mientras tanto, algunos de nuestros vecinos, que durante un tiempo compartió el 2º A con nosotros, sin saber como, si por un golpe de suerte, o mas bien por hacer algunas cosas bien se mudó, pero no se mudó a un piso cualquiera, no, lo hizo al ático. Un ático grande y luminoso. Se permitió comprar muebles de diseño, lleno sus plazas de parking con glamurosos coches que nunca habíamos visto por nuestra modesta comunidad, la verdad es que muchos se alegraron que uno de nuestros vecinos llegara tan alto.

Pero… las cosas ya no serían como antes, nuestro querido vecino, dejo de hablarse con nosotros, de repente se olvidó de todos los muebles que le habíamos dejado para que pudiera vivir de manera medianamente confortable en su anterior y modesta morada… de cuando le dejábamos nuestro coche para ir a trabajar… de cuando le habríamos nuestras puertas para que se asomara a nuestro balcón… se olvido de todo.

Anteriormente, ya nos había dado muestras de lo que iba a ser, en un votación de nuestra comunidad, hizo lo posible por echarnos de la finca, y la verdad es que casi lo logra, algunos dicen que, incluso hizo un pacto con los vecinos de otra calle, creo que con lo de la calle Cádiz, para echarnos de nuestra vivienda, pero eso son cosas que no podemos demostrar.

Bueno, hasta aquí, aunque nos dolió todo lo ocurrido, no nos podíamos quejar en exceso…

Pero ahora mismo la cosa se esta poniendo mas fea todavía, nosotros, nos tenemos que mudar de nuevo al 2º B, somos los únicos culpables del traslado y nada tiene que ver nuestro vecino en esto.

Solo le queremos reprochar una cosa. Estos últimos años hemos logrado algunos bonitos muebles que adornan nuestra humilde casa, mueble jóvenes pero con gran futuro, mueble de distintas forma y edades, muebles que hemos hecho con nuestras propias manos. Pues bien, nuestro querido vecino se empeña una y otra vez en llevarse nuestros mejores muebles, además en la mayoría de casos nos manda al camión de la mudanza sin previo aviso, se lo lleva sin pagar ni dar las gracias. Para mas inri, los quiere para guardar en un almacén, un almacén grande y espacioso donde guarda muebles de muchos vecinos. Cierto es que no puedo decir nada de los muebles de los demás, pero mis muebles son míos y me duele que nadie se lo lleve. Lo peor de todo es que mayoritariamente, después de tener unos años esos muebles en el almacén, decide deshacerse de ellos y los tira, sin ningún tipo de piedad al contenedor… un contenedor del que hemos rescatado algunos de ellos y, tras darle una mano de pintura hemos logrado que vuelvan a adornar nuestra casa.

Ahora mismo tenemos varias muebles de mucha calidad, concretamente nuestro dos juveniles gemelos, tienen mucho futuro por delante, otros buenas piezas acaban de llegar a casa… concretamente los muebles mas pequeños de nuestra casa nos han dado alguna que otra alegría. A pesar de presentarse a un concurso con muebles de diseño traídos a dedo de muchos otras casas, los nuestros, lo hechos en casa, los de nuestra pequeña fábrica, han ganado el concurso… además lo han ganado sin ningún tipo de duda, a pesar, que en algunas de las partes del concursos parecía que el sueño se podía desvanecer.

No me quiera extender mas en la descripción de “esta nuestra comunidad”, simplemente me gustaría decirle al vecino rico, que hay muchos sitios donde comprar muebles buenos y baratos… que busque otros lugares para llenar sus almacenes y que a nosotros nos deje vivir en paz. Nuestra casa, la albinegre, no es grande, no es tan luminosa, no tiene vista al cielo ni al mar, no está llena de muebles de diseño traídos de todas las partes del mundo…. pero nuestra familia, vivamos en el piso que vivamos, tiene sentimientos, pasión, nos hace reír algunas veces y llorar muchas, es una casa en la que siempre hemos dado cabida a todo el mundo, nuestra casa ha sido durante muchos años “ la casa de todos”… que a nadie se le olvide… y nuestra casa, por encima de todas las cosas, tiene unos cimientos sólidos, fuertes y profundos… nuestra casa a sobrevivido a inundaciones y terremotos, ha sido capaz de resistir muchas cosas… nuestra casa es, aunque modesta, nuestra casa y solo pedimos que nos respeten…, no queremos ayudas ni compasiones… solo queremos que nos dejen vivir en paz, y sobre todo, que no se lleven nuestros muebles para luego, dejarlo en un contenedor.

Ah! Una cosa, por muchas vistas, muebles de diseño y glamour que tenga el ático… yo no me pienso cambiar…

Jo soc albinegre, ¿tu?

Pam Pam orellut!!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

EXTRAORDINARIO

RAFA dijo...

BRILLANTE!!!!!!

Unknown dijo...

TIEMPO AL TIEMPO..... PERO DEJEMOS DE QUEJARNOS DE LO QUE HACEN LOS DEMAS ,SIMPLEMENTE FIJEMONOS EN NOSOTROS MISMOS Y DEJEMOS DE LADO TANTAS RABIAS GUARDADAS HACIA LOS VECINOS DEL ATICO.....

juan dijo...

ESPECTACULAR ESTUPENDA Y ORIGINAL FORMA DE DESCRIBIR LA HISTORIA FUTBOLISTICA DE LA PROVINCIA.
ENHORABUENA DESDE EL PREBENJAMIN C DE RAFALAFENA PÒR EL CAMPEONATO

Anónimo dijo...

Bueno... la verdad es que no me esperaba tanto comentario.
De todas formas gracias, gracías a todos, sabeis que así lo siento y así lo escribo.
Bueno, esperemos que pronto, si no tenemos ático, podamos "alquilar" un apartamente con vistas... aunque solo sea un año..., creo que nos lo merecemos.
De todas formas este año nuestro niños de han dado una buena mano de pintura a la casa...mas que pintarla, le han dado vida, mucha vida.
Pam pam orellut!
Por cierto, cuando escribí esto pensaba en todos aquellos padres que han dicho NO a vivir en el ático...
Un abrazo para todos...